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"Pues lo mismo vosotros: si os expresáis en un lenguaje misterioso en lugar de usar palabras inteligibles, ¿quién entendería lo que decís? ¡Estaréis hablando a las paredes!" (14:9)
No creo que Pablo trata de mostrar una preferencia de la razón sobre la experiencia sobrenatural, sino que más bien nos invita a la práctica donde mente y corazón se unen, donde experiencia y razón van de la mano. Se trata de valorar la experiencia integral en la espiritual.
"Concluyendo: el que posea el don de hablar en un lenguaje misterioso, pídale a Dios el don de interpretarlo." (14:13)
Me he movido en una cultura religiosa, donde este pasajes de Pablo, a menudo ha sido tomado como justificación para una fe intelectual, incapaz de abrazar lo sobrenatural y aun lo emocional. Entiendo que dicho énfasis trató de evitar otros extremos, pero ignorar que la ley del péndulo nos lleva a perder de vista la integridad espiritual que enseña Pablo, es igual de peligroso.
¿En mi comunidad cristiana estamos en el extremo de lo emocional y sobrenatural o en el de lo racional e intelectual? ¿Qué implicaría en la práctica una fe integral que abarque la razón, el misterio, el diálogo y la experiencia?
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