Pablo en el capitulo 3 de su segunda carta a los corintios, es muy probable que siga enfrentando cierta campaña de desacreditación hacía su ministerio. Ante ello, él les recuerda que si alguien necesita una carta de recomendación suya, que los propios Corintios son su carta. Sin embargo, al decir esto, el apóstol aprovecha para recordar un punto central en la manera en la que un cristiano debe ver su propio ministerio:"No presumimos, pues, de estar capacitados para hacer algo por cuenta propia; nuestra capacidad proviene de Dios. Él fue quien nos capacitó para ser ministros de una alianza nueva, basada no en la letra de la ley, sino en la fuerza del Espíritu; y la letra de la ley es causa de muerte, mientras que el Espíritu lo es de vida." (3:5-6)
Es decir, mi carrera universitaria, mis estudios teológicos, mis años de ministerio reconocido, por agradecido que pueda estar por ellos, son testigo de que soy incapaz de crear cambios en los demás. Dios puede usar nuestra capacitación y experiencia, pero no depende de la misma para su obra, de hecho, el suele crear cambios a pesar de nuestra debilidad e incapacidad.
Dios actúa a pesar de mi y no en base a mi capacidad, y si puedo percibir en mi alguna capacidad, gracias a Él la he recibido. Y si lo que percibo es incapacidad, también puedo descansar en que la obra es de Dios y no depende de mi.
Concluyo que la formación espiritual es buena, y sigo animando a los cristianos que me rodean a formarse, pero dicha formación no será apropiada si no me ayuda a entender que debo vivir en plena confianza en el Señor, pues solo Él es quien lleva la obra de transformación que deseamos ver en medio de este mundo roto.
"Gracias Señor por capacitarme para ser un ministro de una nueva alianza, esto es un tremendo privilegio que trae sentido y significado en mi vida cotidiana. Perdóname Señor porque a veces caigo en la arrogancia de creer que la transformación de las personas dependen de mi, cuando esto ocurre es fácil caer en la frustración y percibir que estoy en un activismo bajo mis propias fuerzas, siendo presa fácil del estrés y la ansiedad. Confiar en ti no significa cruzarme de brazos, pero si trae paz a mi corazón en medio de las circunstancias que me rodean, porque todo depende de ti y la obra es tuya"
Comentarios
Publicar un comentario